LA EXPERIENCIA VALENTINO, EN PARIS FASHION WEEK
Pierpaolo Piccioli opto por una estrategia de color extrema y monocromática para el prêt-à-porter de esta temporada otoño-invierno 22/23 para Maison Valentino. Cada look en su pasarela era rosa, un tono específicamente fucsia vibrante que incluido el set reinaba en el entorno hasta que apareció un color más, el negro.
El propósito de Piccioli fue usar la monocromía y en cierto aspecto llamarlo monotonía para concentrar toda la atención en las texturas y cortes de su colección, esta teoría del enfoque al detalle, fue conformada por 81 looks que fusionaron propuestas para femeninas y masculinas, y que ademas tenían como objetivo el realzar las siluetas de cada pieza.
Piccioli, quien aposto por utilizar en lugar del característico rojo Valentino o cualquier otro color, el rosa, esto por sus significados culturales, que anteriormente limitaba su uso a los hombres, y que en la antigüedad era utilizados para vestir reyes, cardenales y papas en el renacimiento.
El diseñador afirmó que en la actualidad, estos no son pensamientos que molesten al público intelectual, que aunque ya existía una saturación visual de color rosa en el desfile, este continuaba salida tras salida creando suspenso en espera de los looks que venían.
El rosa inundo 40 looks de pies a cabeza, desde los zapatos de plataforma extremadamente altos y sus zapatillas deportivas, diminutos vestidos con siluetas voluminosas, piezas que nos evocaban a los tabardos largos y estrechos del medivo, hasta vestidos con crinolinas, grandes abrigos de gala y trajes a la medida.
El momento de reflexión
Dentro de este baño de color rosa, el momento de reflexión fue dado por el cambio repentino al total look en negro, en la mitad de la colección, se pudo mostrar la elegancia y la sensibilidad de la Maison Valentino, con una propuesta más poderosa.
Lograda por Pier Paolo Piccioli, al combinar siluetas de encaje o tules bordados, con pantalones que las transforman a siluetas más casuales, apostando por la sensación sobria que está arrasando con la moda para el otoño, y aportando la sensualidad y el misterio que siempre brindará este color.
El desfile cerró con ocho looks más, en color rosa para un gran final, elaborados con de plumas de avestruz, majestuosas capas y bordados entre lentejuelas.
Sin lugar a dudas, la presentación fue una inmersión en un mundo de contraste de color.
Escrito por Eddie Corps